El Consejo Oleícola Internacional se creó en 1959 bajo los auspicios de las Naciones Unidas para administrar la sucesión de acuerdos internacionales sobre productos básicos concertados en los últimos sesenta años con el fin de defender y promover el cultivo del olivo, el aceite de oliva y las aceitunas de mesa. Tiene su sede en Madrid, España.
El COI contribuye de manera decisiva al desarrollo sostenible y responsable de la oleicultura y constituye un foro mundial donde se debaten las políticas a adoptar y se abordan los desafíos presentes y futuros.
Entre sus miembros actuales figuran las principales entidades productoras y exportadoras internacionales de aceite de oliva y aceitunas de mesa. Los miembros productores del COI representan el 94% de la producción mundial de aceitunas, y se localizan principalmente en la región del Mediterráneo.
El COI está comprometido con el desarrollo integrado y sostenible de la oleicultura mundial. Procura convertir este compromiso en avances tangibles para sus países miembros y, lo que es más importante, para las personas que se ganan la vida con el producto del olivo.